La cirugía de elevación de seno maxilar es una técnica segura y efectiva, no obstante, antes de realizar la operación se debe determinar si el paciente puede someterse a ella. Para ello se toma en cuenta su historial clínico y se lleva a cabo tanto una exploración intraoral. Una vez determinado que la persona es idónea, la operación consistirá en realizar un injerto óseo en la zona más posterior del maxilar superior, donde se encuentran los molares y los premolares.
El post-operatorio de una elevación de seno maxilar presenta con una inflamación bastante notable en la zona intervenida e incluso con un hematoma. El pico máximo de hinchazón se produce a las 48 horas de la operación y lo habitual es que todos los síntomas hayan desaparecido entre una semana y diez días después de la intervención.
Para combatir los efectos postoperatorios, el dolor y las molestias, es necesario seguir los cuidados post-operatorios establecidos por el cirujano. Algunos de estos cuidados son:
- Presionar con una gasa la herida durante 1 hora después de la cirugía de elevación del seno maxilar para detener el sangrado.
- Evitar sonar la nariz durante aproximadamente una semana y la creación de presión por succión. De ser necesario estornudar y no se puede evitar, se debe hacer con la boca abierta para aliviar la presión.
- La hinchazón de la zona es muy común, pero las molestias son menores que otros procedimientos de implantología.
- Tomar la medicación antibiótica que le ha indicado en implantologo de la clínica.
- Dormir en una postura baca arriba y algo recostado.
- Secar la sangre de la nariz con una gasa sin sonarla ni hacer presión.
- Los descongestionantes sistémicos también son considerados útiles para ayudar a la reapertura de un seno maxilar bloqueado y para facilitar el drenaje del seno maxilar.
Si se produce una obstrucción del seno por pequeñas partículas del hueso injertado o por el edema podría llevar rápidamente a una infección por agentes patógenos comunes. Para prevenir esta complicación es importante reducir la inflamación por lo que se debe tomar la medicación prescrita por su odontólogo.